

Rodemil Morales Avendaño
1929 - 2025









BIOGRAFÍA
Compártenos aquí la biografía de tu ser querido.
INFORMACIÓN GENERAL
Lugar Velatorio:
Capilla Ave María, La Reina
Fecha Funeral:
10-03-2025
Hora Salida Cortejo:
11:00 am
Lugar Funeral:
Parque del Recuerdo - Huechuraba
Dirección Funeral:
Av. Américo Vespucio 555, Huechuraba, Región Metropolitana, Chile

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Confiamos que el recuerdo de un ser querido se mantendrá siempre presente en sus corazones. En Funeraria Hogar de Cristo tenemos el propósito de acompañarlos en el homenaje para dignificar la vida en un momento que trasciende, para esto los invitamos a expresar sus condolencias, encender una vela, compartir un abrazo, regalar flores o subir sus fotografías.
Querido Profesor: Con mucha pena me noticio de su partida. Nunca olvidé la afabilidad de sus clases y su vehemencia para hacernos entrar en el como usted decía «esotérico mundo» del Derecho Tributario y la Contabilidad. Gracias por esos «comparendos» en que más allá de una interrogación acerca de tributos, tasas e impuestos, buscaba con rigor, hacernos entender un mundo judísico que pocos logran abrazar y cultivar, sin dejar de lado el buen humor, donde la vida es más que «un hecho gravado». Ya volveremos a saludarnos, que el Gran Hacedor le reciba.
Querido profesor, nos topabamaos diariamente en los 90 en el parque forestal, Ud iba de la U a su oficina, yo a procurar y como buen cabllero siempre me saludaba.
Nunca se me olvidó su ayuda en un examen de derecho economico 3 (han pasado 34 años), en donde le demostro al otro profesor ( Cruz) que los alumnos debiamos razonar y no solo memorizar.
Que en paz decanse Ilustre profesor.
Estimado profesor don Rodemil:
Por esta vía quiero saludar a su familia y darle todas mis condolencias en estos momentos difíciles. Don Rodemil, usted vivirá en los recuerdos de muchas personas que marcó y lo conocimos.
Si bien yo no tuve la oportunidad de ser su estudiante, sí compartimos directa o indirectamente mucho. Todos los días nos encontrábamos en la Facultad de Derecho y no hubo una sola oportunidad en que no contase con el educado y cordial saludo del profesor, una característica que hoy la gente desafortunadamente ha ido olvidando. Siempre se veía a don Rodemil muy cortés y un infaltable para él era leer el Diario Oficial que en esa época lo imprimían y repartían.
Personalmente comparto una anécdota muy especial con el profesor Rodemil Morales Avendaño: siendo yo aún estudiante, en una ocasión ambos nos subimos al ascensor de la Facultad y los dos marcamos el quinto piso (nadie más iba en ese ascensor). Como siempre, don Rodemil me saludó muy cordialmente. Por eso misterios que rondan en la Escuela, el ascensor paró en el tercer piso, yo iba algo distraído y el profesor me preguntó si este era el quinto piso, como los dos íbamos a ese piso y no había nadie más en el ascensor le dije que sí y ambos nos bajamos. En ese momento veo que en el piso habían escaleras y que, en consecuencia, no habíamos aún llegado al quinto piso (el más alto de ese edificio). Sin embargo, ya era demasiado y el profesor Rodemil entra raudamente a una sala que no le correspondía a hacer clases. Luego de un momento sale de la sala a la que había entrado y a una velocidad superior a la mía (aún cuando él me superaba en más de 60 años de edad) sube las escaleras y llega al quinto piso. Pasaron unos días y muy avergonzado me lo volví a topar y me acerqué a pedirle disculpas y a explicarle que lo ocurrido ese día había sido un accidente y que no era mi intención mandarlo a una sala diferente. Ante esto, don Rodemil me dijo que no me preocupara, que se dio cuenta de que había sido un accidente y que hasta le había sacado una sonrisa por lo cómica de la situación, por lo demás me dijo que me lo agradecía, porque le había servido para hacer actividad física. Desde ese día nuestra relación cambió, ahora cada vez que me lo topaba no era sólo un saludo cordial, era acompañado siempre de una pequeña conversación y saber cómo estaba cada uno de nosotros y cómo nos estaba yendo en ese momento.
Que en paz descanse, don Rodemil. En su vida marcó a muchas personas con sus enseñanzas del derecho tributario y con su cordialidad y educación sobresaliente, virtudes que hoy lamentablemente nos son cada día más escasas. Estoy seguro que vivirá día a día en muchas anécdotas como esta que dejó para su familia, a quienes les mando mi solidaridad en estos difíciles momentos.
Atentamente,
Fernando Sciolla Albornoz.
Abogado – Universidad de Chile.
Profesor de Derecho Civil en distintas casas de estudio.
Hasta pronto querido profesor. Gracias por todo su apoyo para que «el Kubota» sacara adelante su exámen de grado. Aquí este pequeño homenaje de su alumno y colega. un abrazo al cielo y con seguridad nos veremos algún día.